La Niña Se Quedó En Shock
Llegó el momento decisivo, la niña debía declarar contra su agresor y su declaración era crucial para el caso. Tenía que estar tranquila para recordar bien los hechos y expresarse correctamente pues era muy pequeña. El simple hecho de subir a un estrado en un tribunal con todo el mundo mirándote ya debe de ser agobiante, pero si encima te han hecho algo malo y tienes que verle la cara a tu agresor de nuevo, eso debe de ser aterrador. Cuando la niña se sentó en la silla, y vio aparecer al hombre que la agredió, se quedó totalmente paralizada.
La Niña Se Quedó En Shock
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